La lluvia (y el tiempo) en Estambul

Igual la gente piensa “¿Vas a abrir el blog con una entrada sobre la lluvia?”. Pues sí, hemos venido a jugar, y además quiero rizar el rizo haciendo una afirmación de perogrullo digna de telediario recalcitrante: En Estambul llueve. Pero es que… 

¡¡LLUEVE MUCHO!!

Quiero matizar un par de cosas. Yo vengo de Madrid, donde he vivido toda mi vida. Así que para alguien que venga de allí sí, llueve bastante. Si has vivido en Inglaterra te invito a que te rías de mí. El segundo punto es que considero que llueve mucho en un lugar cuando te ves en la obligación de comprarte unas botas de agua de las fuertes, de plástico y no por moda, porque con el resto de calzado vas a acabar calado.

Estambul es uno de esos lugares en los que dentro del mismo día se pueden dar varias estaciones. Por la mañana, un sol de justicia y calor. A medio día nublado y aguacero de dos horas, y por la tarde cielo despejado y un frío de narices. O que a las 10 de la mañana esté nubladísimo y lloviznando y a las dos de la tarde se abra el día. Esta es la manera favorita que tiene Estambul de estropearte un plan de fin de semana fuera de casa. 

En general, y tomando como ejemplo el pasado año, las temperaturas en Estambul no son demasiado extremas y es de los lugares en los que me atrevería a decir que aún existe la transición entre estaciones de por lo menos un mes, y no de un día para otro. Desde septiembre que los días empiezan a ser más cortos, van bajando paulatinamente las temperaturas, aunque en comparación a otros lugares de Turquía más hacia el sur ya hace “frío”. Ahora mismo las temperaturas oscilan en torno a los 18-20 grados. También existen los días de picos, de estar uno a 24 grados y al siguiente a doce, pero no es lo común. 

En invierno, como es normal, hace frío. Pero la idea es que más que un mes de frío intolerable es un día o una semana de necesitar abrigo fuerte, gorro y bufanda. Creo que eso lo viví solo dos semanas, y una de ellas fue en la que estuvo nevando 4 días, las típicas temperaturas de 0 a 5 grados. Pero en general es un frío bastante llevadero. Recuerdo que el año pasado justo en la semana de Año Nuevo hacía una temperatura muy agradable de 15-17 grados, y tooodo el centro de Estambul vacío, porque claro, es época baja para el turismo. 

Y luego en primavera, las temperaturas empiezan a subir. El verano no lo pasé en Estambul, pero no es un lugar donde aún con el mar al lado te pongas a 40 grados infernales y humedad insoportable de quedarse pegado (Eso dejémoslo para Antalya). Como mucho se llegan a los 30 grados con noches más fresquitas que se agradecen un montón.

Pero yo he venido a hablar principalmente de la lluvia, porque le tengo un poco de tirria. Aquí llueve en todas las estaciones, todos los meses… y juraría a que casi todas las semanas un par de gotas tienen que caer, por cumplir más que nada. La lluvia suele ir acompañada de viento mortífero que es lo más incómodo del mundo y que encima te dobla el paraguas a la primera de cambio. Por cierto, en cuanto caen 2 gotas aparecen de debajo de los adoquines señores que venden paraguas de plástico transparentes – normal y de colores- que duran un suspiro, pero que te pueden sacar del apuro. Su precio universal son 5 liras (NO PAGUEIS MÁS). 

Los tipos de lluvia son: 

• Llovizna-chirimiri continuada, que puede tirarse todo el día lloviendo así sin parar… o varios días (El récord vivido fueron 4 días).

• Lluvia aguacero, también sin parar. De la mañana a la noche, sí. Lo que produce las mini-inundaciones porque se atascan las alcantarillas.

Otros casos: 

• Lluvia intermitente y cojonera.

• Días nublados en los que amenaza todo el día con llover y luego no cae ni una gota (Ayer y hoy).

• Lluvia en la parte europea y no en la asiática (Y viceversa)- Suele ocurrir que ves aproximarse la Tormenta Final y luego les cae a los del otro lado (SÍ).

• Sol de justicia y goterones como puños- Sé que ocurre en todas partes, pero siempre me pareció una manera de reírse de los humanos.

• El típico tornado: 

Si bien llover llueve en todo el mundo, el problema de Estambul es el guarreo que se forma esos días. Como hay muchas cuestas el agua cae en forma de riachuelo y las alcantarillas colapsan con facilidad, sobre todo si cae una tromba inesperada. Muchos coches no tienen piedad al pasar por tu lado y te calan. Además hay bastantes baldosines sueltos, lo que produce el efecto Baldosa con Regalo tan majo cuando la pisas. En otras calles o cuando pasas cerca de obras (y hay muchas) se forman mini barrizales que no sabes cómo sortear. Y en general, mucha suciedad que arrastra la lluvia que te comes con los zapatos o con los pantalones que lleves (Historia real de unos pantalones vaqueros blancos que después de 3 lavados siguen con manchas de un día de lluvia… D: Es que cuando salí no llovía, pero estaba nublado). Y es por todo ello que son necesarias las botas de agua como el comer si vais a vivir una larga temporada aquí. O en resumen, que vengáis preparados para hacer frente a la lluvia porque muchos días os tendréis que topar con esta molesta amiga.

El gallo es sabio. Seguid su ejemplo.